En los últimos 12 meses el peso se ha devaluado un 6% con respecto al dólar.
No parece nada, frente al nivel de la inflación, pero es una tendencia continua y claramente hay un decisión de devaluar al peso, cayendo en la vieja creencia de que esto mejora la competitividad.
Sin estabilidad y previsibilidad monetaria, nunca habrá una mejora sostenible.
Un punto a observar, como ya lo he dicho es el real brasilero, el peligro de una gran devaluación del peso, está determinado sin duda por el real, si este llegara a devaluarse.
Que tengan una buena semana.
Gustavo